Septiembre en Buenos Aires

Qué hermoso mes el de septiembre, es un mes tan especial como digno dador de vida, se produce la magia del renacimiento, me encanta caminar por las calles de tierra o arena y ver como crese el pasto tierno a la vera del camino, Como florecen las flores silvestres, como los tréboles, lirios, margaritas, y aquellas diminutas sin nombres conocidos, levantar la vista y la magia se extiende a los arboles con pequeños brotes en sus ramas y algunos florecidos sin hojas todavía pero cubiertos de flores, como el duraznero, los cerezos, los ciruelos los manzanos, ¡que placer para los sentidos! ver como empieza a brillar el sol cada mañana, sentir su tibieza en la cara, ver como los pichones de los pájaros están completando su plumaje prestos a dejar el nido que los cobijo del crudo invierno. Yo vivo en la costa Argentina en este momento de la vida, es el lugar que he elegido para reposar mi vejez en paz con Dios, con la vida, con la naturaleza, es tan lindo ver el mar en las tardes de primavera y disfrutarlo en los días de verano que no hay dinero en el mundo con que pagarlo, septiembre es esto una caminata de la mano de mi amor...mojarnos los pies a la orilla del mar, correr con mi perro por la arena verlo tan feliz cavando pozos vuscancando valla a saber que, sentarnos a la noche a tomar una copa en nuestro patio con un cielo lleno de estrellas, ver a nuestro pequeño hijo convertido en un hombre de bien, aquí a nuestro lado porque los lazos son fuertes y el amor todo lo puede y el decidió estar a nuestro lado, no sé porque quise hablar mes de septiembre tal vez porque en él se produce el milagro de la vida será por ahí yo estaré esperando algún milagro ¿No te parece?.