María Amalia Sara Lacroze de Fortabat una mujer para recordar que no paso desapercibida por este mundo el sábado 18 de febrero 2012 a los 90 años la empresaria y coleccionista de arte que heredo en 1976 la cementera Loma Negra y 155 mil hectáreas de tierras que le permitieron convertirse en una clara exponente de la oligarquía, Amalita como solían llamarla en los círculos sociales que frecuentaba, con más de 1600 millones de dólares se ubico en el ranking del top 300 de la revista Forbes, comenzó a amasar su fortuna durante la dictadura militar en Argentina país de origen y formo parte de los “capitanes de la industria” en el gobierno de el Dr. Raúl Alfonsín pero gozo de un espacio privilegiado en los años 90 con su entrañable amigo Carlos Menen quien la nombro Embajadora Plenipotenciaria y titular del fondo Nacional de las Artes.
Vendió en 1025 millones de dólares la cementera Loma Negra a la empresa de capitales brasileños
Camargo Correa. A los 90 años en una de sus imponentes mansiones que tiene en Bs, As, murió Amalia Lacroze de Fortabat dueña de una de las fortunas más grandes de la Republica Argentina fue un símbolo de una época difícil de olvidar la señora de la alta burguesía. Construyo su imperio económico durante la dictadura militar y brillo en todo su esplendor de la mano del gobierno Menemista.
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